El objetivo principal es hacer críticas escuetas pero sinceras. Dejad la masculinidad frágil fuera de este hilo, esto no va de demostrar que uno es muy machote porque come salsas muy picantes. En primer lugar porque tal concepto es absurdo y en segundo lugar porque este es un foro de blanquitos y cualquier niña de 12 años del sur de India ingiere a diario cantidades de picante que nos harían explotar la cabeza a cualquiera de los aquí presentes.
Habrá dos escalas, la primera la riconudez (representada con de uno a cinco
) y la segunda el picante (de un a cinco 
).Empezamos con una que conocemos todos por sentar una base:
El tabasco de toda la vida
Una salsa muy versátil y poco intrusiva, simple hasta decir basta: guindillas, vinagre y sal. Una bendición de simpleza en un mundo que tiende a la sobrecomplicación.
A un nivel muy parecido está
Crystal
Es otra salsa picante de Louisiana, que conocí cuando estuve por allí. Curiosamente Crystal es la salsa más extendida en Louisiana y de calle, mientras que no encontré Tabasco en ningún sitio, que es la salsa más conocida internacionalmente. La única diferencia con el tabasco es que esta está hecha con cayena y el tabasco con guindillas del mismo nombre. Es también avinagrada y combina con todo, es quizá algo más suave y dulce que el tabasco. Me traje dos botellas que duraron poco.
Da Bomb
Había visto esta salsa en The hot ones y quería probarla para comprobar cuánto pica por mí mismo. Vale, pues ya lo he comprobado, pica muchísimo más de lo que puedo tolerar y tiene un sabor horrible, y esto me pareció lo más imperdonable. Traté de usarla diluyendo una pizca en un bol de ramen o de alubias, por ejemplo, y de este modo el picor es tolerable, pero el sabor que aporta es muy malo. Terminó en la basura. No malgastéis vuestro dinero como servidor.
0.1(norcilla)
