Por fin hemos podido desarrollar una cápsula interplanetaria, que aprovechará las "autopistas interplanetarias" para llegar a sus destinos
Mapa del sistema de autopistas con origen en Kerbin
La construcción es simple. Un núcleo de control con una antena, debajo 2 baterias de 200 unidades de potencia cada una, rodeadas por 8 paneles fijos que permitirán su recarga, tras ellos un módulo y una canasta de experimentación y por último un depósito de 1 tonelada con nuestro motor cohete mas avanzado, una frusleria de algo mas de dos toneladas, lo que permite que sea lanzada con el modelo liquido 1.4.
Se realiza el primer lanzamiento, que no va como es lo deseado. El sistema de control no tiene suficiente potencia para hacer las correcciones necesarias y tras múltiples problemas la nave llega a una órbita retrógrada, dificultando su envió a otros mundos. Además nuevos cálculos revelan que para la mitad de los planetas el combustible no será suficiente, así que se rediseña la sonda. Se le añade un volante de inercia y se dobla el combustible, con lo que la nueva sonda está ahora en casi 4 toneladas, aun suficiente para el liquido 1.4
De este modelo se lanzan 6 sondas, una por cada cuerpo que orbita el sol.
Primer modelo en rampa
segundo modelo tras ignición
Con las 7 cápsulas en órbitas de aparcamiento es cuestión de esperar hasta que los planetas estén en la conjunción adecuada para cada cápsula, lo que provocará viajes menores de un mes para algunas y viaje de casi dos años para la que va al planeta mas externo, Eelo.
Sonda modelo 2 en tránsito, la joroba es la cápsula de experimentos menores
La primera sonda se renombró Sol 1 y se puso en órbita solar, esperando que en algún momento podría hacer un descenso hacia el sol para reaprovechar sus experimentos, aunque la cantidad de energía necesaria lo hace improbable.
Durante el viaje se hacen algunos experimentos en órbita solar, que son retransmitidos a Kerbin por la antena para conseguir los datos, proporcionando, sólo con ellos, 500 puntos de ciencia, que provocarán un avance gigantesco. Por coincidencia, las dos primeras naves en llegar son Moho 1 y duna 1, casi al mismo tiempo, pero con moho un par de horas antes. No queda suficiente combustible para entrar en órbita, pero se agotará todo tratando de realizar un frenado para maximizar el tiempo dentro de su área de influencia y la posibilidad de realizar experimentos.
Moho 1 en su punto de máximo acercamiento transmitiendo los resultados de experimentos
La gran sorpresa llego en Duna, cuando nuestros hombres fueron a monitorizar su captura, en la sonda que menos combustible debía gastar y mas ciencia podría proporcionarnos, descubrieron que no estaba allí. Es mas, revisando los datos ni siquiera estaban los restos de la segunda etapa de lanzamiento orbitando Kerbin. Acusaciones de magia empezaron a crecer entre los kerbonautas mas primitivos y pronto surgió la historia de un monstruo que vive en las profundidades del espacio y devora las anves que se atreven a perturbarlo, lo bautizaron el kraken del infierno
Tras este problema inesperado el mando de la misión quedo a al espera de la llegada de la siguiente sonda, Eve 1
Las sondas restantes y sus órbitas, las del sistema interior no aparecen reflejadas, el primer planeta en aparecer es Kerbin
