Nícotin escribió:No, si ya, era por no...
Mucho acusar de maricón, pero cómo ha saltado la liebre nada más ver la preciosura de colgante. Si algún día salgo del armario tendré que pedírtelo prestado.
Y ni que decir tiene que escuchar una canción de Björk* no es tanto castigo como veros hacer el gilipollas tras Shiz mientras ponéis vuestras poses más secsis y comprensivas apelando al hamiguismo. Cuántos habréis creído llevaros el gato al agua.
Bourbaki está muy malamente.