9ª Jornada: Lenina Vs Criadillas
9ª Jornada: Lenina Vs Criadillas
Tema: Los toros ¿sí o no? Me refiero a la fiesta nacional no a los animales!!
- bud spencer
- Mojahedín
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- Sr. Taimado
- Mojahedín
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Re: 9ª Jornada: Lenina Vs Criadillas
NeNa_007 escribió:Tema: Los toros ¿sí o no? Me refiero a la fiesta nacional no a los animales!!
Que gran tema.
Ains.
- Dorian Gray
- moromielda
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Totalmente de acuerdo con mi admirado Sr. Taimado. Han dejado ustedes lo mejor para el final, justo cuando nadie se presenta ¡Árbitros nuevos pero ya!
"No voy a dejar de hablarle sólo porque no me esté escuchando.
Me gusta escucharme a mí mismo. Es uno de mis mayores placeres.
A menudo mantengo largas conversaciones conmigo mismo,
y soy tan inteligente que a veces no entiendo ni una palabra de lo que digo."
Me gusta escucharme a mí mismo. Es uno de mis mayores placeres.
A menudo mantengo largas conversaciones conmigo mismo,
y soy tan inteligente que a veces no entiendo ni una palabra de lo que digo."
- Criadillas
- Palomitero mórbido
- Mensajes: 17396
- Registrado: 01 Ago 2003 19:38
- Ubicación: En la calle del pepino.
Yo estoy esperando a que Lenina dé muestras de querer combatir.
De todas formas, puesto que es el último combate, propongo que nos pasemos por el forro los horarios y días de entrega, y esperemos lo que haya que esperar.
Sea cual sea la opción, me apetece combatir, puesto que me temo que este va a ser mi último combate en mucho, mucho tiempo.
Lenina, tú decides.
Hagamos una buena traca de despedida.
Directa a los huevos, of course.
De todas formas, puesto que es el último combate, propongo que nos pasemos por el forro los horarios y días de entrega, y esperemos lo que haya que esperar.
Sea cual sea la opción, me apetece combatir, puesto que me temo que este va a ser mi último combate en mucho, mucho tiempo.
Lenina, tú decides.
Hagamos una buena traca de despedida.
Directa a los huevos, of course.
Dunkis dijo:
Criadillas es un hombre triste de derechas, quién lo iba a decir.
Criadillas es un hombre triste de derechas, quién lo iba a decir.
- Dorian Gray
- moromielda
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- Registrado: 23 Oct 2003 19:35
Mi querido Sr. Criadillas:
Ya que su oponente no da señales ni de vida ni de muerte y dado el interés que usted muestra para con este tema, yo me ofrezco voluntario para el enfrentamiento. Usted podrá así quitarse el mono posteador hasta su vuelta y yo —ya que el ajedrez no es lo mío— podré darle la oportunidad de derrotarme... ya que en nuestro combate no pudo.
Además, he de agradecerle que fue nuestro combate el que me ayudó a entender la filosofía del P.C. Me lo pasé realmente bien y hubiera entendido perfectamente la derrota en caso de producirse.
Así que, si usted quiere, si la Srta. Nena_007 lo permite y la Srta. Lenina sigue sin dar señales, aceptaré gustosamente el enfrentamiento. Espero sus noticias de ustedes. La de todos o la de cualquiera.
Un saludo,
Dorian Gray
P.D. Postearía poniéndome del lado del NO.
Ya que su oponente no da señales ni de vida ni de muerte y dado el interés que usted muestra para con este tema, yo me ofrezco voluntario para el enfrentamiento. Usted podrá así quitarse el mono posteador hasta su vuelta y yo —ya que el ajedrez no es lo mío— podré darle la oportunidad de derrotarme... ya que en nuestro combate no pudo.
Además, he de agradecerle que fue nuestro combate el que me ayudó a entender la filosofía del P.C. Me lo pasé realmente bien y hubiera entendido perfectamente la derrota en caso de producirse.
Así que, si usted quiere, si la Srta. Nena_007 lo permite y la Srta. Lenina sigue sin dar señales, aceptaré gustosamente el enfrentamiento. Espero sus noticias de ustedes. La de todos o la de cualquiera.
Un saludo,
Dorian Gray
P.D. Postearía poniéndome del lado del NO.
"No voy a dejar de hablarle sólo porque no me esté escuchando.
Me gusta escucharme a mí mismo. Es uno de mis mayores placeres.
A menudo mantengo largas conversaciones conmigo mismo,
y soy tan inteligente que a veces no entiendo ni una palabra de lo que digo."
Me gusta escucharme a mí mismo. Es uno de mis mayores placeres.
A menudo mantengo largas conversaciones conmigo mismo,
y soy tan inteligente que a veces no entiendo ni una palabra de lo que digo."
- Criadillas
- Palomitero mórbido
- Mensajes: 17396
- Registrado: 01 Ago 2003 19:38
- Ubicación: En la calle del pepino.
Dorian Gray escribió:Así que, si usted quiere, si la Srta. Nena_007 lo permite y la Srta. Lenina sigue sin dar señales, aceptaré gustosamente el enfrentamiento. Espero sus noticias de ustedes. La de todos o la de cualquiera.
Pues por mí estupendo, siempre y cuando nuestra querida árbitro esté de acuerdo, y Lenina no aparezca, como has dicho.
Y si aparece, siempre habrá tiempo de otro combate contra ella, con otras opciones.
P.D. Postearía poniéndome del lado del NO.
A lo fácil, como siempre, mi comodona indefinida.
Yo encantado.
Dunkis dijo:
Criadillas es un hombre triste de derechas, quién lo iba a decir.
Criadillas es un hombre triste de derechas, quién lo iba a decir.
Bueno me temo que hay que ir cerrando el chiringuito para saber la clasificación final de cara a la Copa.
Si quereis podeis hacer un combate fuera de competición, para disfrute del personal.
Por ahora, Criadillas, como Lenina no aparece, hazme una pequeña defensa de la opción que elijas, para que pueda darte los 3 puntos.
Si quereis podeis hacer un combate fuera de competición, para disfrute del personal.
Por ahora, Criadillas, como Lenina no aparece, hazme una pequeña defensa de la opción que elijas, para que pueda darte los 3 puntos.
- Criadillas
- Palomitero mórbido
- Mensajes: 17396
- Registrado: 01 Ago 2003 19:38
- Ubicación: En la calle del pepino.
Ok.
Puesto que Lenina es una mujer sensible a todas luces, y ñoña a muchas otras, estoy seguro al 100% que elegiría la opción de toros No.
Lenina nos haría un lacrimógeno repaso (posiblemente un relato) acerca de los últimos minutos de vida de un toro de lidia. La sangre, el dolor del animal, las banderillas firmemente clavadas en su lomo, el tendido de sol poblado de personas sin corazón, disfrutando de tan desagradable y cruento espectáculo....
Un drama, vamos.
Y no quiero dar la impresión de ser ajeno a esa sangría final, o que me dá igual ese dolor y sufrimiento al que el animal se ve sometido en sus últimos segundos de vida. Pero la vida me ha enseñado que todo es cuestión de prioridades.
Y lo que es completamente incuestionable es que el toreo es el arte más grande en todos los aspectos, que hemos creado en este país.
Un arte centenario, un arte bello en el que no hay trampa ni cartón. Un toro frente a un hombre. Fuerza bruta frente a la inteligencia y la sangre fría.
Y no vale cualquier cosa. No vale sajar al toro hasta que éste muera.
No.
Hay que bailar con él y acariciarle los muslos con el estoque. Hay que palpar su rostro y que resolle frente a tí, dejando que gotas de humedad y váho salgan al exterior, hacia el soleado cielo.
Hay que dejarle patear el suelo. Cargar. Sentir su rabia hacia tí. Rabia animal, fuerza incontrolable.
Hay que enseñarle el tiempo preciso, perfecto, su rojo objetivo.
Y ni una décima de segundo antes, ni una después, arrebatárselo de su vista, burlarlo, esquivarlo, pasando a escasos milímetros de él, haciendo que su estampida se detenga detrás tuyo, y que el suelo tiemble bajo tus pies durante unos segundos.
Respirar su olor amargo y pesado.
Y por último, escuchar el clamor del público, también partícipe de esa obra maestra.
El toreo es un arte. Un arte con una carga estética y emocinal prácticamente insuperable, y el sufrimiento temporal de un animal no puede ser capaz de restarle el menor ápice de nobleza al espectáculo.
Porque no es una matanza, sino un duelo, y ha habido casos célebres en los que el torero a sido destrozado por el toro. Un combate justo en cualquiera de sus desenlaces posibles.
Y no soy alguien insensible, no me malinterpreteis.
Pero tampoco seamos cerebros carcomidos por Greenpeace sin capacidad de razonamiento más allá de lo evidente.
Más quisiera yo tener la vida de un toro de lidia.
Un toro que al nacer es criado con mimo y cariño, alimentado con una calidad difícil de ver en ningún otro animal en cautividad. Un toro con praderas vedadas en las que fortalecer sus músculos hasta convertirse en una bestia portentosa en fuerza. Un ser al que le ofrecen hembras con las que aparearse con asiduidad...
Más quisiera yo vivir así. Jeje.
Bueno, yo y cualquiera, no lo neguéis.
¿Que la muerte es lenta y cruenta?
Puede ser, pero los pollos y las gallinas de corral son degollados hasta el desangramiento. Los cerdos son apilados en camiones y electrocutados con saña. Las ovejas, ídem. Las vacas descuartizadas..... y así con millones de animales, continuamente, a lo largo y ancho del planeta.
El ser humano es un depredador implacable y de ojos gélidos.
No veo nada de malo en convertir la muerte en el espectáculo más bello.
Cientos de obras de arte han sido erigidas con el sufrimiento de miles de seres vivos. La especia humana tiene gran experiencia en eso.
Miles de hombres murieron en la construcción de las Pirámides de Egipto, por ejemplo, y nadie pide que las derriben.
O un ejemplo muchísimo más cercano y nítido.
Y me pondré sincero:
Vivo a escasos kilómetros de La Cruz de Los Caídos. Un monumento elevado sobre los cadáveres de docenas y docenas de presos de guerra.
Un monumento elevado a mayor gloria de unos hijos de puta.
Y sin embargo, todas las mañanas al levantarme, prepararme el desayuno caliente, y asomarme a la terraza, veo esa cruz titánica, elevarse entre las montañas, salpicada por la luz del amanecer, brillante...
Y la llevo viendo catorce años así.
Y no hay día que no me apasione observándola.
Es bellísima, deberíais verla.
Y nadie en su sano juicio la derruiría.
Es arte en el más puro significado de la palabra, sostenido por el sufrimiento.
El toreo es igual.
La belleza de la violencia. Los gráciles movimientos de una muerte de oro brillante y rojo intenso.
Larga vida a los toros.
O así debiera ser.
Puesto que Lenina es una mujer sensible a todas luces, y ñoña a muchas otras, estoy seguro al 100% que elegiría la opción de toros No.
Lenina nos haría un lacrimógeno repaso (posiblemente un relato) acerca de los últimos minutos de vida de un toro de lidia. La sangre, el dolor del animal, las banderillas firmemente clavadas en su lomo, el tendido de sol poblado de personas sin corazón, disfrutando de tan desagradable y cruento espectáculo....
Un drama, vamos.
Y no quiero dar la impresión de ser ajeno a esa sangría final, o que me dá igual ese dolor y sufrimiento al que el animal se ve sometido en sus últimos segundos de vida. Pero la vida me ha enseñado que todo es cuestión de prioridades.
Y lo que es completamente incuestionable es que el toreo es el arte más grande en todos los aspectos, que hemos creado en este país.
Un arte centenario, un arte bello en el que no hay trampa ni cartón. Un toro frente a un hombre. Fuerza bruta frente a la inteligencia y la sangre fría.
Y no vale cualquier cosa. No vale sajar al toro hasta que éste muera.
No.
Hay que bailar con él y acariciarle los muslos con el estoque. Hay que palpar su rostro y que resolle frente a tí, dejando que gotas de humedad y váho salgan al exterior, hacia el soleado cielo.
Hay que dejarle patear el suelo. Cargar. Sentir su rabia hacia tí. Rabia animal, fuerza incontrolable.
Hay que enseñarle el tiempo preciso, perfecto, su rojo objetivo.
Y ni una décima de segundo antes, ni una después, arrebatárselo de su vista, burlarlo, esquivarlo, pasando a escasos milímetros de él, haciendo que su estampida se detenga detrás tuyo, y que el suelo tiemble bajo tus pies durante unos segundos.
Respirar su olor amargo y pesado.
Y por último, escuchar el clamor del público, también partícipe de esa obra maestra.
El toreo es un arte. Un arte con una carga estética y emocinal prácticamente insuperable, y el sufrimiento temporal de un animal no puede ser capaz de restarle el menor ápice de nobleza al espectáculo.
Porque no es una matanza, sino un duelo, y ha habido casos célebres en los que el torero a sido destrozado por el toro. Un combate justo en cualquiera de sus desenlaces posibles.
Y no soy alguien insensible, no me malinterpreteis.
Pero tampoco seamos cerebros carcomidos por Greenpeace sin capacidad de razonamiento más allá de lo evidente.
Más quisiera yo tener la vida de un toro de lidia.
Un toro que al nacer es criado con mimo y cariño, alimentado con una calidad difícil de ver en ningún otro animal en cautividad. Un toro con praderas vedadas en las que fortalecer sus músculos hasta convertirse en una bestia portentosa en fuerza. Un ser al que le ofrecen hembras con las que aparearse con asiduidad...
Más quisiera yo vivir así. Jeje.
Bueno, yo y cualquiera, no lo neguéis.
¿Que la muerte es lenta y cruenta?
Puede ser, pero los pollos y las gallinas de corral son degollados hasta el desangramiento. Los cerdos son apilados en camiones y electrocutados con saña. Las ovejas, ídem. Las vacas descuartizadas..... y así con millones de animales, continuamente, a lo largo y ancho del planeta.
El ser humano es un depredador implacable y de ojos gélidos.
No veo nada de malo en convertir la muerte en el espectáculo más bello.
Cientos de obras de arte han sido erigidas con el sufrimiento de miles de seres vivos. La especia humana tiene gran experiencia en eso.
Miles de hombres murieron en la construcción de las Pirámides de Egipto, por ejemplo, y nadie pide que las derriben.
O un ejemplo muchísimo más cercano y nítido.
Y me pondré sincero:
Vivo a escasos kilómetros de La Cruz de Los Caídos. Un monumento elevado sobre los cadáveres de docenas y docenas de presos de guerra.
Un monumento elevado a mayor gloria de unos hijos de puta.
Y sin embargo, todas las mañanas al levantarme, prepararme el desayuno caliente, y asomarme a la terraza, veo esa cruz titánica, elevarse entre las montañas, salpicada por la luz del amanecer, brillante...
Y la llevo viendo catorce años así.
Y no hay día que no me apasione observándola.
Es bellísima, deberíais verla.
Y nadie en su sano juicio la derruiría.
Es arte en el más puro significado de la palabra, sostenido por el sufrimiento.
El toreo es igual.
La belleza de la violencia. Los gráciles movimientos de una muerte de oro brillante y rojo intenso.
Larga vida a los toros.
O así debiera ser.
Dunkis dijo:
Criadillas es un hombre triste de derechas, quién lo iba a decir.
Criadillas es un hombre triste de derechas, quién lo iba a decir.