Vamos a hacer una revisión de las últimas cositas que están saliendo al respecto de las grandes sagas DC/Marvel que se nos vienen encima y que ya llevan un tiempo en rodaje en los EHEHUHUH. Aprovechando que en el Universo DC ya han empezado a cargar el tema con la Cuenta Atrás a Crisis Infinita, empezaremos por ellos, mismamente.
Y aunque no la hayan encuadrado como parte de la “Cuenta Atrás” misma, empezaremos por Crisis de Identidad, ya que empieza a posicionar a los personajes para los acontecimientos que se llevarán a cabo.
Por cierto ¿Qué es una gran saga? Bueno, pues es algo así como una lavativa universal que pilla transversalmente a todas o casi todas las colecciones del universo en cuestión. Por ejemplo, durante Actos de Venganza (Marvel), los villanos se ponen de acuerdo para pegar el palo a todos los superhéroes, pero para pillarlos en bragas, deciden atacarlos insólitamente, intercambiando a sus enemigos de toda la vida entre ellos, para poder derrotarles con el elemento sorpresa. Este evento abarca todas las colecciones durante uno, dos o tres meses, hasta que se resuelve más o menos la metatrama directora del acontecimiento en algún número especial o en la serie limitada creada para el ajo.
Pero bueno, que lo de los Actos de Venganza es un pedete comparado con lo que se supone que se le viene encima al Universo DC y que tiene pinta de ser la mayor lavativa desde Crisis en Tierras Infinitas (que por algo digo yo se le parecerá en nombre). Porque cada acontecimiento va cambiando las circunstancias y el panorama del universo en cuestión.
Las portadas del Turner no me acaban de gustar del todo, ya que las encuentro demasiado “pinuperas” de la escuela “lee-liefield-silvestri-loquesea”, pero esta y alguna que otra, de las siete que lleva esta historia, hay que reconocer que están bien paridas. Más que nada, porque no sale el típico cachas o jamona posando, que es lo que más hace.
Crisis de Identidad empieza “modestamente” pero ya hace algunos cambios decisivos con personajes clásicos.
El asunto que mueve la historia es un ataque directo a un familiar de uno de los superhéroes del Universo DC. Básicamente, es la realización de la consecuencia directa a la decisión de la mayoría de los superhéroes a adoptar identidades secretas. Porque el asunto del llevar máscaras, antifaces, cascos o disfraces no tenía tanto que ver con el molar más que nadie (o al menos, no del todo) y sí más relacionado con que, dedicándose a lo que se dedican, muy probablemente los malosos acaben por tratar de joderles por donde son más vulnerables, sus familias, amigos, etc… Ergo, me pongo un antifaz y no me reconoce ni el Tato.
Y esta “Crisis de Identidad” va de eso : Alguien se carga a uno y parece que no va a ser el único. Esto lleva a una movilización masiva de los heroes, que se ponen todos a investigar y a rastrear a los posibles villanos para tratar de identificar al perpetrante.
Lo bonito de esta historia es ver el desarrollo bastante inteligente y reflexionado de un tema que sólo se da en los comics de los superhéroes. Y no tiene nada que ver con los poderes. Supongo que ya hartos de historias en que viene el típico malo-malote de turno con poderes para desgarrar el tejido de la realidad transcósmica, los guionistas están tirando por otros derroteros tan o más interesantes y que también son exclusivos del mundo de los superhéroes. Como el tema de las identidades secretas. Algo que, por cierto, ya venía haciendo Marvel en su universo (identidad pública del capi, Tony Stark como secretario de Defensa, etc…) y que desarrolla aún más en Civil War.
Crisis de Identidad es harto interesante. Por un lado, está todo el thriller, que está muy bien construido y es de los de flipar con el final. El guionista te lo pone a huevo para que te devanes los sesos utilizando lo que ves y tus conocimientos del Universo DC para tratar de saber quien es el asesino, lo que es poco menos que absorbente. Luego, se revelan temitas “turbios” relacionados con los superhéroes y en concreto de la Liga de la Justicia. Porque al salir esto a la luz, se ponen de relieve casos pasados en los que las identidades de los heroes estuvieron comprometidas y se revela como los heroes lidiaron con el tema y como eso revolucionó y generó una toma de decisiones complicada y conflicto entre ellos.
Y todo esto sin tener que meterse en muchas peleas de superhéroes y efectos especiales variados.
Eso sí, lo poco que hay, la pelea con Deathstroke, chana que te pedes.
Bueno, en resumén, es una historia que se disfruta bastante. Más si se conocen o han seguido mínimamente a sus personajes y se conocen sus personalidades e historiales, para que le choque a uno el ver ciertas cosas.
Sobre todo, la edición que sacó en su momento Zinco era maravillosa, explicando uno por uno los personajes más desconocidos que iban saliendo en las página.
