Desde hace tiempo tengo una fantasia que me ronda la cabeza poder hacer. Se trata de algo que puede parecer raro, pero me apetece bastante probarlo, la verdad. No se que os parecera pero alla voy:
Quiero ligarme a una desconocida habiendo salido vestido de mujer.
Ojo eh, con elegancia pero al mismo tiempo con marrulleria canallesca. Quiero ponerme un vestido bonito, unos taconazos, un buen pelucon -lamentablemente mi peinado actual no es muy femenino-, pintarme, ponerme una fragancia y salir a la calle de caza. Quiero ir donde la chica con mas clase y atractiva del bar, nada de chonis o pijas estiradas con cara de ir oliendo mierda, quiero a la tia que todos ven que es una mujer autentica. Segura de si misma pero sin aires de superioridad. Alguien que siempre haya tenido muy claro lo que es y como es y que porlo tanto vaya pisando fuerte por la vida sin necesidad de avasallar. Vamos, lo que se suele definir como una tia cojonuda. Y que ademas sea heterosexual, ni tan siquiera bi.
Mi reto es seducirla, embaucarla y atraerla al lesbianismo. Que dude de sus creencias y sus valores que tan segura la han hecho y se plantee, no, mas aun: y que arda en deseos de probar a otra mujer por mis gestos, por mis palabras susurradas al oido, por mis miradas discretas e indiscretas.
Y que cuando llegue la hora de la verdad y vea el truco este viviendo el momento y la experiencia con tanta intensidad y se haya fraguado una simbiosis que todo de igual deviniendo simplemente en una noche de sexo pleno y completo a todos los niveles.
No os confundais, no tiene que ver con un anhelo secreto de vestirme de mujer y salir a ser un crosdresser. Si asi fuera no me importaria decirlo pero las veces que lo probe en su dia no senti nada especial, ni tan siquiera un minimo morbo. Esto trata mas con el hecho de la dominacion absoluta. Poner patas arriba el mundo de una persona segura de si misma, que se lance a lo desconocido y a la hora de la verdad hacerla ver que en el fondo da igual todo menos el vinculo que ha tenido con otra persona a lo largo de esa noche, tanto espiritual como carnal.
-Si se hace, se hace bien.
