Relatos de Merodeador, con algún poema
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Relatos de Merodeador, con algún poema
Pues eso, en este hilo voy a colgar los relatos y demás peladillas que he publicado en este y otros foros.
¿Por qué lo hago se preguntará alguno? Pues la primera y principal razón es porque puedo, e invito al que quiera hacerlo que lo haga también con sus textos, ojo, en su propio hilo ¿eh?
Ya está bien de tanto preámbulo y empiezo con la recopilación.
Con Dios
¿Por qué lo hago se preguntará alguno? Pues la primera y principal razón es porque puedo, e invito al que quiera hacerlo que lo haga también con sus textos, ojo, en su propio hilo ¿eh?
Ya está bien de tanto preámbulo y empiezo con la recopilación.
Con Dios
Afinador de cisternas
- Merodeador
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MIRADA FRÍA
Mirada fría
Merodeador
Me miraba fijamente a los ojos, el hecho indiscutible, por obvio, de que fuera cadáver no variaba en un ápice la fuerza de esa mirada.
Se llamaba Lucas y era mejillón, mejillón de las rías gallegas, de tamaño grande y aspecto inmejorable teniendo en cuenta su estado, el poco de pimentón de la salsa en escabeche en la que se conservaba maquillaba la palidez de la muerte.
En esa mirada se notaba el odio de su agonía, muerte acaecida seguro por vapores de agua a los que le sometieron, abrió su anacarada y alargada concha y miro, miro con desesperación buscando al culpable de tan macabro sufrimiento, para al final solo ver vapores.
Su ataúd colectivo en chapa galvanizada con cierre fácil, que dada su corpulencia compartía solo con otros siete camaradas de desdichas, estaba realizado por la funeraria Friscos.
Mayorista en el sector, tenia a bien y reconocido por todos los expertos catadores, entre los que me incluyo, ser estos mejillones de los mejores por ricos y sabrosos, especial mención al tamaño grande en escabeche, no el muy grande (5 a 6) cuyo sabor desmerece, no haciendo honor a su elevadísimo precio. El grande a secas que salen riquísimos.
Pues como os estaba contando, este mejillón de mirada fría, fija y penetrante lo junte con otro menos agraciado, de vista perdida y tamaño mediano para que en el tenedor, juntos, tuvieran el ultimo viaje desde su velatorio en el platito pequeño y alargado de aperitivo hasta la cueva del eterno descanso, lugar en el que la maquinaria los trituraría y mezclados con líquido formarían una pasta redonda y viscosa, para ya perdida su forma nombre y condición, caer en el oscuro abismo.
Merodeador
Me miraba fijamente a los ojos, el hecho indiscutible, por obvio, de que fuera cadáver no variaba en un ápice la fuerza de esa mirada.
Se llamaba Lucas y era mejillón, mejillón de las rías gallegas, de tamaño grande y aspecto inmejorable teniendo en cuenta su estado, el poco de pimentón de la salsa en escabeche en la que se conservaba maquillaba la palidez de la muerte.
En esa mirada se notaba el odio de su agonía, muerte acaecida seguro por vapores de agua a los que le sometieron, abrió su anacarada y alargada concha y miro, miro con desesperación buscando al culpable de tan macabro sufrimiento, para al final solo ver vapores.
Su ataúd colectivo en chapa galvanizada con cierre fácil, que dada su corpulencia compartía solo con otros siete camaradas de desdichas, estaba realizado por la funeraria Friscos.
Mayorista en el sector, tenia a bien y reconocido por todos los expertos catadores, entre los que me incluyo, ser estos mejillones de los mejores por ricos y sabrosos, especial mención al tamaño grande en escabeche, no el muy grande (5 a 6) cuyo sabor desmerece, no haciendo honor a su elevadísimo precio. El grande a secas que salen riquísimos.
Pues como os estaba contando, este mejillón de mirada fría, fija y penetrante lo junte con otro menos agraciado, de vista perdida y tamaño mediano para que en el tenedor, juntos, tuvieran el ultimo viaje desde su velatorio en el platito pequeño y alargado de aperitivo hasta la cueva del eterno descanso, lugar en el que la maquinaria los trituraría y mezclados con líquido formarían una pasta redonda y viscosa, para ya perdida su forma nombre y condición, caer en el oscuro abismo.
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KIKOS
Kikos
Merodeador
Desde que me hicieron esa prueba no trago igual, me atraganto más fácilmente.
Esta tarde comiendo unos kikos se me fueron por otro sitio y casi me asfixio, tal fue la cantidad de trozos que se encaminaron por el respiradero, se me saltaban la lagrimas, joder, toserlos y escupirlos, que mal, lo salados que estaban y lo que raspaban.
La prueba consistió en la introducción de un tubo flexible iluminado a través de la boca hasta los bronquios, para poder hacer esta prueba se necesita que colabores, me comieron la cabeza para ello, pues para que te tragues esos tubos los tienes que respirar para hacer que pasen, que angustia te ves morir tres veces y todo esto mordiendo una pieza de madera con un agujero y el dolor, un dolor cabrón cuando te cogen una muestra de tejido para analizarlo, se me ponen los pelos de punta al recordarlo.
Y el cachondeo de las médicos en practicas, que le pasan el control de tu intimo tubo y se descojonan, jugando con la maquinita viendo lo negro que andas por dentro y encima emplamao, que una puso la mano encima y del salto casi me arranca los bronquios, no me extraña las risas, no.
Ese día me metieron para hacerme una tomografía por emisión de positrones, consiste en inyectar un radio fármaco combinado con glucosa y éste será captado por las células cancerosas, de existir un cáncer, que consumen más glucosa. El radio fármaco hará que se localicen las zonas donde se encuentre un tumor, y digo me metieron, porque era una camilla con un aro acojonarte que tenia que pasar por mi cuerpo a lo largo mientras desde una botella me caía un gota a gota, menos mal que me avisaron porque cuando el monstruo de las luces pasaba a la altura de los testículos se te calentaban hasta quemarte por dentro.
Hijos de puta me pusieron el goteo lento y la tuve que repetir al día siguiente, al final de la semana tenia los huevos ya duros, jajaja.
La ultima putadita que repitieron varias veces y que la recomiendo en plan masoca es la gasometría, joder con la gasometría, me entere luego que es recomendable la aplicación de anestesia local para realizarla, su puta madre, cuatro veces me la realizaron y a pelo como los hombres - donde esta la lista para apuntarse a maricón- es sencilla solo te tienen que sacar sangre, pero mira de una arteria no de una vena y no se puede mezclar con sangre venosa. Te la sacan normalmente del punto de la muñeca donde tienes el pulso, tienen que calcular la profundidad donde la tienes y tener cuidado pues por ahí ronda un tendón de lo mas doloroso si se roza, y sí roza, vamos que si se roza.
Me cago en los kikos y en su puta madre, que mal rato me hicieron pasar esta tarde.
Merodeador
Desde que me hicieron esa prueba no trago igual, me atraganto más fácilmente.
Esta tarde comiendo unos kikos se me fueron por otro sitio y casi me asfixio, tal fue la cantidad de trozos que se encaminaron por el respiradero, se me saltaban la lagrimas, joder, toserlos y escupirlos, que mal, lo salados que estaban y lo que raspaban.
La prueba consistió en la introducción de un tubo flexible iluminado a través de la boca hasta los bronquios, para poder hacer esta prueba se necesita que colabores, me comieron la cabeza para ello, pues para que te tragues esos tubos los tienes que respirar para hacer que pasen, que angustia te ves morir tres veces y todo esto mordiendo una pieza de madera con un agujero y el dolor, un dolor cabrón cuando te cogen una muestra de tejido para analizarlo, se me ponen los pelos de punta al recordarlo.
Y el cachondeo de las médicos en practicas, que le pasan el control de tu intimo tubo y se descojonan, jugando con la maquinita viendo lo negro que andas por dentro y encima emplamao, que una puso la mano encima y del salto casi me arranca los bronquios, no me extraña las risas, no.
Ese día me metieron para hacerme una tomografía por emisión de positrones, consiste en inyectar un radio fármaco combinado con glucosa y éste será captado por las células cancerosas, de existir un cáncer, que consumen más glucosa. El radio fármaco hará que se localicen las zonas donde se encuentre un tumor, y digo me metieron, porque era una camilla con un aro acojonarte que tenia que pasar por mi cuerpo a lo largo mientras desde una botella me caía un gota a gota, menos mal que me avisaron porque cuando el monstruo de las luces pasaba a la altura de los testículos se te calentaban hasta quemarte por dentro.
Hijos de puta me pusieron el goteo lento y la tuve que repetir al día siguiente, al final de la semana tenia los huevos ya duros, jajaja.
La ultima putadita que repitieron varias veces y que la recomiendo en plan masoca es la gasometría, joder con la gasometría, me entere luego que es recomendable la aplicación de anestesia local para realizarla, su puta madre, cuatro veces me la realizaron y a pelo como los hombres - donde esta la lista para apuntarse a maricón- es sencilla solo te tienen que sacar sangre, pero mira de una arteria no de una vena y no se puede mezclar con sangre venosa. Te la sacan normalmente del punto de la muñeca donde tienes el pulso, tienen que calcular la profundidad donde la tienes y tener cuidado pues por ahí ronda un tendón de lo mas doloroso si se roza, y sí roza, vamos que si se roza.
Me cago en los kikos y en su puta madre, que mal rato me hicieron pasar esta tarde.
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POEMAS ERÓTICOS
Poemas eróticos
Merodeador
Mariscada
La carne tensa e insatisfecha
blasfema y pide lo innombrable
legión de deseos atormentan
muerdes, arañas, delirante
te voy a follar hasta agotarte
Orejas en muslos abanican
coño, boca, caliente y líquida
pierdo mi polla en tu sonrisa
escupe, succiona, traga
jadeos, risas, mariscada
Morder tus tetas, joderte el alma
meterme entre tus carnes
lamer tus pies, desgarrarte
gritar, sudar, gemir, llorar
te voy a follar hasta agotarme
Roza
Roza tu piel contra la mía
escalofríos levantan
deseos dormidos que despiertan
niña no me seas insensata.
Tu boca mi boca atenaza
mi lengua tu lengua regatea
nuestras salivas se solapan
sabor de nueva primavera.
Mano que escruta insaciable
pezones duros cual acero
mi polla tiesa como un sable
en tus manos está en el recreo.
Mi mano posada en tu culo
agarra, aprieta, separa
veo, cierro, miro, abro
que bonito coño, mi amada
Desgraciada
Pezones doloridos
polla desgarrada
surcos en espalda
Marcas, desgraciada
piernas: tenaza y guadaña
salvaje madona descarriada
confundido y tonto
Duele, desgraciada
tomas lo no dado
ríes debocada
robas la palabra
abusas, desgraciada
huelo en tu mirada
miedo del mañana
nunca en la cama
Despacio, desgraciada
Círculos perfectos
Tú culo redondo planetario
describe círculos perfectos
dedos dibujan su hermosura
tiembla, vibración, retintineo
Labios ahora rojos como fuego
el clítoris acaricio con ternura
tesoro que sabe a resinas
vulva río de hermosura
Extiendo mi mano en tu vello
manifiesta debajo su viveza
dos dedos tienen lo querido
tiento, muevo, aprieto, agito
respigo, placer y recompensa.
Merodeador
Mariscada
La carne tensa e insatisfecha
blasfema y pide lo innombrable
legión de deseos atormentan
muerdes, arañas, delirante
te voy a follar hasta agotarte
Orejas en muslos abanican
coño, boca, caliente y líquida
pierdo mi polla en tu sonrisa
escupe, succiona, traga
jadeos, risas, mariscada
Morder tus tetas, joderte el alma
meterme entre tus carnes
lamer tus pies, desgarrarte
gritar, sudar, gemir, llorar
te voy a follar hasta agotarme
Roza
Roza tu piel contra la mía
escalofríos levantan
deseos dormidos que despiertan
niña no me seas insensata.
Tu boca mi boca atenaza
mi lengua tu lengua regatea
nuestras salivas se solapan
sabor de nueva primavera.
Mano que escruta insaciable
pezones duros cual acero
mi polla tiesa como un sable
en tus manos está en el recreo.
Mi mano posada en tu culo
agarra, aprieta, separa
veo, cierro, miro, abro
que bonito coño, mi amada
Desgraciada
Pezones doloridos
polla desgarrada
surcos en espalda
Marcas, desgraciada
piernas: tenaza y guadaña
salvaje madona descarriada
confundido y tonto
Duele, desgraciada
tomas lo no dado
ríes debocada
robas la palabra
abusas, desgraciada
huelo en tu mirada
miedo del mañana
nunca en la cama
Despacio, desgraciada
Círculos perfectos
Tú culo redondo planetario
describe círculos perfectos
dedos dibujan su hermosura
tiembla, vibración, retintineo
Labios ahora rojos como fuego
el clítoris acaricio con ternura
tesoro que sabe a resinas
vulva río de hermosura
Extiendo mi mano en tu vello
manifiesta debajo su viveza
dos dedos tienen lo querido
tiento, muevo, aprieto, agito
respigo, placer y recompensa.
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PINTO, PINTO
Pinto, pinto
Merodeador
Ya son dos fines de semana seguidos, no lo he podido soportar, he empezado de nuevo el juego.
Las guardias en urgencias son desequilibrantes, lo tengo que apuntar para mi posible defensa. La vida humana se nos escapa de las manos en un ir y venir sin sentido.
Jóvenes que parecen fuertes se quiebran como pajas secas al menor golpe y viejos reviejos con las constantes abstractas se agarran a la vida con fuerza sobrehumana.
Mi mayor problema es la falta de tiempo, se suceden las intervenciones una tras otra. Si se pudiera dar el tiempo que no tenemos a pacientes concretos se les podría estabilizar y tendrían un cuadro clínico con visos de esperanza.
Estos pensamientos se repetían y repetían, sacándome de mis casillas, pero vi una solución...
No era al azar, no, intenté al principio utilizar un baremo para la elección del paciente no viable, me costó tiempo y romperme la cabeza.
La mecánica era asombrosamente fácil y media dosis de ***** puesta en la vía les llamaba al sueño de los justos lentamente, sin dolor y de forma inexorable. Firmaba yo mismo el informe y a otra cosa.
Pasado el tiempo y ante un caso en el que sí conocía al paciente, me salte las reglas. Le tocó, murió y con dolor. Desde entonces se fue aflojando la aplicación de esas normas que tanto tiempo me costaron elaborar.
Hoy he aplicado el Pinto, pinto, gorgorito, todo me igual, recién nacidos, muchachas virginales, hombres, mujeres, ancianos, que más da ¡que se jodan! les ha llegado su hora.
Si la desgracia os lleva a las salas de urgencias de un hospital, tened el oído alerta...
Pinto, pinto, gorgorito,
saca la mano de veinticinco.
¿En qué lugar?
En Portugal.
¿En qué calleja?
En la Moraleja.
Esconde la mano que viene la vi-e-ja…TE TOCO.
(Canción infantil)
Merodeador
Ya son dos fines de semana seguidos, no lo he podido soportar, he empezado de nuevo el juego.
Las guardias en urgencias son desequilibrantes, lo tengo que apuntar para mi posible defensa. La vida humana se nos escapa de las manos en un ir y venir sin sentido.
Jóvenes que parecen fuertes se quiebran como pajas secas al menor golpe y viejos reviejos con las constantes abstractas se agarran a la vida con fuerza sobrehumana.
Mi mayor problema es la falta de tiempo, se suceden las intervenciones una tras otra. Si se pudiera dar el tiempo que no tenemos a pacientes concretos se les podría estabilizar y tendrían un cuadro clínico con visos de esperanza.
Estos pensamientos se repetían y repetían, sacándome de mis casillas, pero vi una solución...
No era al azar, no, intenté al principio utilizar un baremo para la elección del paciente no viable, me costó tiempo y romperme la cabeza.
La mecánica era asombrosamente fácil y media dosis de ***** puesta en la vía les llamaba al sueño de los justos lentamente, sin dolor y de forma inexorable. Firmaba yo mismo el informe y a otra cosa.
Pasado el tiempo y ante un caso en el que sí conocía al paciente, me salte las reglas. Le tocó, murió y con dolor. Desde entonces se fue aflojando la aplicación de esas normas que tanto tiempo me costaron elaborar.
Hoy he aplicado el Pinto, pinto, gorgorito, todo me igual, recién nacidos, muchachas virginales, hombres, mujeres, ancianos, que más da ¡que se jodan! les ha llegado su hora.
Si la desgracia os lleva a las salas de urgencias de un hospital, tened el oído alerta...
Pinto, pinto, gorgorito,
saca la mano de veinticinco.
¿En qué lugar?
En Portugal.
¿En qué calleja?
En la Moraleja.
Esconde la mano que viene la vi-e-ja…TE TOCO.
(Canción infantil)
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DESMONTANDO EL MECANO
Desmontando el mecano
Merodeador
Sigo su camino en zigzag, encorvado, atento, nada se me escapa, dura el empeño lo que mis pulmones dan de sí.
Terminó su camino de ida y la pista de carreras plateada da la vuelta, sin poder contener ya el aire, exhalo y descanso.
Dos, tres respiraciones y ya la sangre se calienta de nuevo, el sudor perla mi frente y el hormigueo sube desde los pies.
El dragón empieza de nuevo su camino y le persigo con la máxima atención, me va la vida, no puede existir ningún fallo. Me tapo de la brisa de la noche apuntando mi nuca a las estrellas sentado en el trono que me da una piedra.
Hace tiempo que no pienso nada, todo es sencillo, mi mundo es sencillo.
Mil veces deseé morir y morí mil veces. Mentía a Dios y rezaba con el Demonio oraciones de murmullos y quejas.
Comí familia, comí madre, padre y hermanos, me los comía. Comía amigos. Solo deje huesos pulverizados.
Me devoré. Seco, desencajado y enjuto era mi nombre y a pesar de eso tenía ternura, a través de acero veía el mundo y el mundo solo veía el acero.
Recuerdos que la memoria, lista ella, coloca a su antojo. Diez años de verano con paseos de pupila de alfiler. Década de piel.
Merodeador
Sigo su camino en zigzag, encorvado, atento, nada se me escapa, dura el empeño lo que mis pulmones dan de sí.
Terminó su camino de ida y la pista de carreras plateada da la vuelta, sin poder contener ya el aire, exhalo y descanso.
Dos, tres respiraciones y ya la sangre se calienta de nuevo, el sudor perla mi frente y el hormigueo sube desde los pies.
El dragón empieza de nuevo su camino y le persigo con la máxima atención, me va la vida, no puede existir ningún fallo. Me tapo de la brisa de la noche apuntando mi nuca a las estrellas sentado en el trono que me da una piedra.
Hace tiempo que no pienso nada, todo es sencillo, mi mundo es sencillo.
Mil veces deseé morir y morí mil veces. Mentía a Dios y rezaba con el Demonio oraciones de murmullos y quejas.
Comí familia, comí madre, padre y hermanos, me los comía. Comía amigos. Solo deje huesos pulverizados.
Me devoré. Seco, desencajado y enjuto era mi nombre y a pesar de eso tenía ternura, a través de acero veía el mundo y el mundo solo veía el acero.
Recuerdos que la memoria, lista ella, coloca a su antojo. Diez años de verano con paseos de pupila de alfiler. Década de piel.
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SOCORRO
Socorro
Merodeador
Socorro era dulce, deliciosa y con ese punto de warrilla que nos gusta a los octogenarios. Ponía las cuñas como ninguna y si por casualidades de la vida ese día la pirulilla se amorcillaba, se reía y nos contaba picardías.
Un día me enseño un pezón.
Socorro era una cajera preciosa, la conocí mientras robaba un banco.
No podía evitarlo, rara era la semana que no la atracaba solo por verla.
Después de unos meses la policía empezó a sospechar, que listos.
No tuve más remedio que pedirle que saliéramos.
Socorro nunca defraudaba, en la cocina era única.
No había plato que se le negara ni postre imposible.
Cuando nos enteramos que la habían detenido por descuartizar a sus dos hijas nos explicamos esa carne tan rica del día anterior.
Creo que me comí un pezón.
Socorro nunca fue popular, era triste y feúcha
Su delgadez hacia su presencia casi imperceptible.
No me costo tener relaciones con ella a escondidas.
Cuando al tiempo se convirtió en modelo me llamo y quedamos.
Ella no era ruin.
Os preguntareis donde están en este relato los pezones ¿no?
Jijiji.
Gulp, glup…
Socorro no esperaba carta.
En la residencia dormitaba lo que le quedaba de existencia.
– Socorro, Socorro, tienes carta –
Cual grande fue su sorpresa.
Se acerco arrastrando los pies y la cogió con desconfianza.
En un rincón y después de unos momentos para serenarse empezó a abrirla.
Señorita ha sido agraciada, entre un millón cuatrocientas mil personas, y elegida ante notario para disfrutar de un coche, un apartamento en Torrevieja, un televisor y un equipo de sonido...Su débil corazón se rompió con la emoción y le aparto de entre los vivos impidiéndole seguir leyendo …para participar en el sorteo solo tiene que…
Murió con una sonrisa.
PD.- Estoy hasta los pezones de tanta propaganda basura.
Merodeador
Socorro era dulce, deliciosa y con ese punto de warrilla que nos gusta a los octogenarios. Ponía las cuñas como ninguna y si por casualidades de la vida ese día la pirulilla se amorcillaba, se reía y nos contaba picardías.
Un día me enseño un pezón.
Socorro era una cajera preciosa, la conocí mientras robaba un banco.
No podía evitarlo, rara era la semana que no la atracaba solo por verla.
Después de unos meses la policía empezó a sospechar, que listos.
No tuve más remedio que pedirle que saliéramos.
Socorro nunca defraudaba, en la cocina era única.
No había plato que se le negara ni postre imposible.
Cuando nos enteramos que la habían detenido por descuartizar a sus dos hijas nos explicamos esa carne tan rica del día anterior.
Creo que me comí un pezón.
Socorro nunca fue popular, era triste y feúcha
Su delgadez hacia su presencia casi imperceptible.
No me costo tener relaciones con ella a escondidas.
Cuando al tiempo se convirtió en modelo me llamo y quedamos.
Ella no era ruin.
Os preguntareis donde están en este relato los pezones ¿no?
Jijiji.
Gulp, glup…
Socorro no esperaba carta.
En la residencia dormitaba lo que le quedaba de existencia.
– Socorro, Socorro, tienes carta –
Cual grande fue su sorpresa.
Se acerco arrastrando los pies y la cogió con desconfianza.
En un rincón y después de unos momentos para serenarse empezó a abrirla.
Señorita ha sido agraciada, entre un millón cuatrocientas mil personas, y elegida ante notario para disfrutar de un coche, un apartamento en Torrevieja, un televisor y un equipo de sonido...Su débil corazón se rompió con la emoción y le aparto de entre los vivos impidiéndole seguir leyendo …para participar en el sorteo solo tiene que…
Murió con una sonrisa.
PD.- Estoy hasta los pezones de tanta propaganda basura.
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Y EL DOLOR
Y el dolor
Merodeador
Como todas las noticias, la que nos marcó la vida fue pasando por los ciclos que le son propios.
Lo primero fue la conmoción, nadie se esperaba que desaparecieran casi cincuenta niños del Hospital de Maternidad, todos los periódicos, radios y televisiones lo cubrieron para informar, primero los medios locales, seguidos por las nacionales e internacionales, la noticia recorrió el mundo como un escalofrío. Todo valía, todos opinaban, médicos, enfermeras y personal del hospital repetían hasta la saciedad los mismos tópicos en las entrevistas.
Barajaban rumores sobre posibles rescates, venganzas de terroristas y hasta se hablo de sectas satánicas, repito de nuevo que todo valía.
La policía no se lo explicaba. Nosotros los directamente afectados, los padres y madres de los niños nos recomendaros aislarnos del bullicio de los informativos, no hacíamos declaraciones teníamos un portavoz y nos envolvieron con sicólogos y atenciones medicas aconsejadas para casos de catástrofes. Vamos, estábamos empastillados como zombis,
Marta y yo no hablábamos, tardamos unas semanas en empezar a culpabilizarnos. Ya sé que es ilógico pero los "si no" se entremezclaban en nuestras palabras, el dolor de la desaparición del que apenas vimos se unía a la lenta recuperación de Marta del parto complicado que sufrió.
Esa etapa en nuestra relación se fue pasando, como también se fue pasando y olvidándose la noticia en los informativos, los amigos que nos intentaron consolar al principio ya preferían no vernos, nuestro dolor les sobrepasaban y se sentían inútiles y como si molestaran.
Nuestras relaciones afectivas empezaban y terminaban en el beso al despertarnos, nos seguíamos queriendo, nos amábamos pero el dolor se colaba entre los dos y nos enmudecía.
Lo que al principio fueron semanas, luego fueron meses, el olvido selló la noticia como si nada hubiera pasado, y sellados quedaron nuestros corazones para amar.
Cuando la radio en el noticiario, durante el desayuno, comunicó que en unas latas de comida se habían encontrado restos humanos, nos miramos, no hizo falta decirnos nada, salimos corriendo al supermercado y acaparamos todas las siniestras latas, teníamos que enterrar a nuestro niño... y el dolor.
Merodeador
Como todas las noticias, la que nos marcó la vida fue pasando por los ciclos que le son propios.
Lo primero fue la conmoción, nadie se esperaba que desaparecieran casi cincuenta niños del Hospital de Maternidad, todos los periódicos, radios y televisiones lo cubrieron para informar, primero los medios locales, seguidos por las nacionales e internacionales, la noticia recorrió el mundo como un escalofrío. Todo valía, todos opinaban, médicos, enfermeras y personal del hospital repetían hasta la saciedad los mismos tópicos en las entrevistas.
Barajaban rumores sobre posibles rescates, venganzas de terroristas y hasta se hablo de sectas satánicas, repito de nuevo que todo valía.
La policía no se lo explicaba. Nosotros los directamente afectados, los padres y madres de los niños nos recomendaros aislarnos del bullicio de los informativos, no hacíamos declaraciones teníamos un portavoz y nos envolvieron con sicólogos y atenciones medicas aconsejadas para casos de catástrofes. Vamos, estábamos empastillados como zombis,
Marta y yo no hablábamos, tardamos unas semanas en empezar a culpabilizarnos. Ya sé que es ilógico pero los "si no" se entremezclaban en nuestras palabras, el dolor de la desaparición del que apenas vimos se unía a la lenta recuperación de Marta del parto complicado que sufrió.
Esa etapa en nuestra relación se fue pasando, como también se fue pasando y olvidándose la noticia en los informativos, los amigos que nos intentaron consolar al principio ya preferían no vernos, nuestro dolor les sobrepasaban y se sentían inútiles y como si molestaran.
Nuestras relaciones afectivas empezaban y terminaban en el beso al despertarnos, nos seguíamos queriendo, nos amábamos pero el dolor se colaba entre los dos y nos enmudecía.
Lo que al principio fueron semanas, luego fueron meses, el olvido selló la noticia como si nada hubiera pasado, y sellados quedaron nuestros corazones para amar.
Cuando la radio en el noticiario, durante el desayuno, comunicó que en unas latas de comida se habían encontrado restos humanos, nos miramos, no hizo falta decirnos nada, salimos corriendo al supermercado y acaparamos todas las siniestras latas, teníamos que enterrar a nuestro niño... y el dolor.
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A
A
Merodeador
“En un foro que no merece la pena ni recordar, le daba al moderador por cambiar, cortar y cochinear usando sus poderes en disputas y piques.
Para animarle, y ver que no se sintiera solo, colgué este poema de Quevedo con unos poemas satíricos en forma de morcilla final para alegrarle el día”
Antes alegre andaba; agora apenas
alcanzo alivio, ardiendo aprisionado;
armas a Antandra aumento acobardado;
aire abrazo, agua aprieto, aplico arenas.
Al áspid adormido, a las amenas
ascuas acerco atrevimiento alado;
alabanzas acuerdo al aclamado
aspecto, a quien admira antigua Atenas.
Agora, amenazándome atrevido,
Amor aprieta aprisa ascos, aljaba;
aguardo al arrogante agradecido.
Apunta airado; al fin, amando acaba
aqueste amante al árbol alto asido,
adonde alegre, ardiendo, antes amaba.
Francisco de Quevedo
Como moverlo quisieras por ser poema.
aunque no moleste lo mas mínimo
para no tener que entrar en disputa.
ahora mismo te llamo
**** ** ****
Quizás no te guste el pareado
quizás me pase ya de la ralla
pero quien nació de prostituta
en España le llaman
**** ** ****
Como no hay dos sin tres
y motivos nunca faltan
aprovechando que como fruta
ya mismo te llamo
**** ** ****
Merodeador.
Merodeador
“En un foro que no merece la pena ni recordar, le daba al moderador por cambiar, cortar y cochinear usando sus poderes en disputas y piques.
Para animarle, y ver que no se sintiera solo, colgué este poema de Quevedo con unos poemas satíricos en forma de morcilla final para alegrarle el día”
Antes alegre andaba; agora apenas
alcanzo alivio, ardiendo aprisionado;
armas a Antandra aumento acobardado;
aire abrazo, agua aprieto, aplico arenas.
Al áspid adormido, a las amenas
ascuas acerco atrevimiento alado;
alabanzas acuerdo al aclamado
aspecto, a quien admira antigua Atenas.
Agora, amenazándome atrevido,
Amor aprieta aprisa ascos, aljaba;
aguardo al arrogante agradecido.
Apunta airado; al fin, amando acaba
aqueste amante al árbol alto asido,
adonde alegre, ardiendo, antes amaba.
Francisco de Quevedo
Como moverlo quisieras por ser poema.
aunque no moleste lo mas mínimo
para no tener que entrar en disputa.
ahora mismo te llamo
**** ** ****
Quizás no te guste el pareado
quizás me pase ya de la ralla
pero quien nació de prostituta
en España le llaman
**** ** ****
Como no hay dos sin tres
y motivos nunca faltan
aprovechando que como fruta
ya mismo te llamo
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Merodeador.
Afinador de cisternas
- Merodeador
- Mojahedín
- Mensajes: 856
- Registrado: 17 Mar 2004 01:18
COLILLLAS
Colillas
Merodeador
Me desperté en la cama atado de pies y manos con vendas.
El hospital olía bien, las flores de las visitas se amontonaban en las puertas de los pasillos donde al final se marchitaban.
La noche llama a la muerte con el ruido metálico de la camilla para amortajar que recorre los pasillos
Dormitaba durante el día los ratos que podía con el fin de pasar la noche despierto.
Deambulaba por las salas como alma en pena y recorría las plantas buscando colillas en los descansillos de los ascensores.
Fumaba escondido en el hueco de la escalera de la última planta.
Robaba.
En esas excursiones nocturnas, cuando me sentía más valiente, quitaba a los terminales los goteos de morfina y se los cambiaba por agua. Lo que robaba de esa manera se lo cambiaba a los yonquis por tabaco y golosinas.
Puta y mil veces puta esta enfermera chivata que me pilló y me ató a la cama, seguro que se lo dice a mis padres
Merodeador
Me desperté en la cama atado de pies y manos con vendas.
El hospital olía bien, las flores de las visitas se amontonaban en las puertas de los pasillos donde al final se marchitaban.
La noche llama a la muerte con el ruido metálico de la camilla para amortajar que recorre los pasillos
Dormitaba durante el día los ratos que podía con el fin de pasar la noche despierto.
Deambulaba por las salas como alma en pena y recorría las plantas buscando colillas en los descansillos de los ascensores.
Fumaba escondido en el hueco de la escalera de la última planta.
Robaba.
En esas excursiones nocturnas, cuando me sentía más valiente, quitaba a los terminales los goteos de morfina y se los cambiaba por agua. Lo que robaba de esa manera se lo cambiaba a los yonquis por tabaco y golosinas.
Puta y mil veces puta esta enfermera chivata que me pilló y me ató a la cama, seguro que se lo dice a mis padres
Afinador de cisternas