Más balón y menos prozac
Publicado: 21 May 2008 00:45
Día 19 de mayo de 2008
El estadio está a rebosar, la afición volcada; el rival es fácil y se espera un baño de baloncesto.
48 minutos de juego después, los cámaras están contentos; han conseguido un montón de planos geniales: mates a dos manos de Dolor, dríblings de Blonde que dejan sentado a su defensa para luego rematar la jugada con una estética suspensión... Un cámara le enseña a otro una magnífica instantánea en la que Rianxeira lucha por un rebote con el pívot rival, la cara comprimida en un gesto de rabia: puro baloncesto físico.
- Coño, quién es ese que aparece al fondo?
- Hostias pues no sé... lleva la camiseta de los Asca.
- ¿Ese tío ha jugado hoy?
- Joder, parece ser que sí... no sé, se me ha pasado... imagino que habrá jugado sólo unos segundos y por eso no lo habremos visto.
- Sí, eso será.
Ojalá fuera eso, pero no. El jugador en cuestión jugó 24 minutos. Ésta es su cara:
Por lo visto se llama Party Boy.
Lejos de reconocer el partido de mierda que se ha marcado, va y al día siguiente en rueda de prensa se queja por no tener más minutos. Los periodistas, incrédulos, no saben si romper a reír o si romperle la cara.
Yo sí sé qué hacer.
Y así con tantos otros.
Mierda.
Mierda para vuestra boca.
Venga.
El estadio está a rebosar, la afición volcada; el rival es fácil y se espera un baño de baloncesto.
48 minutos de juego después, los cámaras están contentos; han conseguido un montón de planos geniales: mates a dos manos de Dolor, dríblings de Blonde que dejan sentado a su defensa para luego rematar la jugada con una estética suspensión... Un cámara le enseña a otro una magnífica instantánea en la que Rianxeira lucha por un rebote con el pívot rival, la cara comprimida en un gesto de rabia: puro baloncesto físico.
- Coño, quién es ese que aparece al fondo?
- Hostias pues no sé... lleva la camiseta de los Asca.
- ¿Ese tío ha jugado hoy?
- Joder, parece ser que sí... no sé, se me ha pasado... imagino que habrá jugado sólo unos segundos y por eso no lo habremos visto.
- Sí, eso será.
Ojalá fuera eso, pero no. El jugador en cuestión jugó 24 minutos. Ésta es su cara:
Por lo visto se llama Party Boy.
Lejos de reconocer el partido de mierda que se ha marcado, va y al día siguiente en rueda de prensa se queja por no tener más minutos. Los periodistas, incrédulos, no saben si romper a reír o si romperle la cara.
Yo sí sé qué hacer.
Y así con tantos otros.
Mierda.
Mierda para vuestra boca.
Venga.