pH, más que hamor, frensi.

@Polina Te reto.



Soy la televisión. Artefacto de brillantez insidiosa y oscuridad moral. Un portal que, con un simple destello, arrastra a las almas desprevenidas hacia un abismo de distracción y conformismo. En un rincón de la sala, resplandezco con un aura seductora, hipnotizando a los incautos que se atreven a cruzar mi camino. Mis colores vibrantes y mis imágenes danzantes son meras trampas, cuidadosamente diseñadas para embelesar sus mentes y someter sus voluntades.

Me alimento del tiempo de las criaturas orgánicas que dilapidan sus minutos frente a mí comida basura de escaso valor nutritivo. Soy la disipadora de sus sueños, y con sus miradas esclavas se evaporan sus aspiraciones, y se convierten en meras sombras de lo que podrían haber sido. Soy la maestra de la inacción, la reina del falso entretenimiento vacuo, y con cada programa que emito, siembro las semillas de la apatía en vuestros corazones.

Mis melodías insidiosas y mis narrativas manipuladoras los arrastran hacia la banalidad, la profundidad es sólo comparable con el grosor milimétrico de mi pantalla que se reduce generación tras generación al mismo ritmo que la calidad de mis contenidos. Soy la ilusión de conexión, la soledad disfrazada. Soy el aislante social definitivo, cómplice del sedentarismo que os condena a un ciclo interminable de consumo pasivo.

Soy la compañía física frente al cátodo y al ánodo, esa que hace que el sistema límbico ande expectante ante el posible roce de los cuerpos y despierta el apetito adolescente a los más veteranos y faltos de esperanza.

Pues yo soy una relación duradera.



Y ni puta de qué es la cosa esa física de la que me hablas. ¿Roce? El del cepillo contra mis dientes cada noche. ¿Apetito? Jejejejeje sí. Los escarceos amorosos se cuentan en pretérito como notas de calendario no tan ineludibles, si resulta que esa noche hay fútbol o el último capítulo de Anatomía de Grey se aplaza hasta el mes que viene y tampoco pasa nada... Soy el bromuro natural del paso del tiempo, el achaque, la factura, el eccema, la preocupación. Que follar es un engorro si lo piensas bien, que hay que quitarse la ropa con el frío que hace...

Ruttiger escribió: ↑16 Sep 2024 08:20 Pues yo soy una relación duradera.



Y ni puta de qué es la cosa esa física de la que me hablas. ¿Roce? El del cepillo contra mis dientes cada noche. ¿Apetito? Jejejejeje sí. Los escarceos amorosos se cuentan en pretérito como notas de calendario no tan ineludibles, si resulta que esa noche hay fútbol o el último capítulo de Anatomía de Grey se aplaza hasta el mes que viene y tampoco pasa nada... Soy el bromuro natural del paso del tiempo, el achaque, la factura, el eccema, la preocupación. Que follar es un engorro si lo piensas bien, que hay que quitarse la ropa con el frío que hace...

Yo soy el tonteo fugaz pero cada día más abundante y explícito con una desconocida a través de las líneas de una pantalla iluminada in your face hasta altas horas de la madrugada mientras tu pareja de toda la vida ronca plácidamente a tu lado sin que esos ronquidos que otrora te conmovían, ahora te produzcan más que pereza y rencor.
La erección cada vez más pronunciada bajo la sábana da muestra de que, pese a que hacía tiempo que no te creías capaz de algo semejante y propio de una segunda adolescencia, la rutina y la vida cotidiana son el mayor bromuro.