Maravilloso, divertido y entrañable, sobre todo para los que amen la fantasía medieval y los juegos de rol. Los personajes son animalejos y monstruitos. Todo un homenaje a los tópicos de la fantasía medieval (bárbaros, mazmorras, conjuros, catacumbas, hechizos...) pero además por la vía del humor. A mí me hizo reir en más de una ocasión, y es que el protagonista, un pato que se ve envuelto en la trama por incompetente, resulta ridículo y torpe hasta el punto de ser simpático.
Además, es una serie donde reaparecen los mismos personajes principales. Este parece ser el primer número, ya que El Guardián (de la Mazmorra), un gorrión más bien bajito, hace una perfecta presentación de su creación mortífera, que hará segregar babas de añoranza a los más freaks, o no.
Hellblazer - La Naturaleza de la Bestia
Varias historias cortas con un hilo conductor: el encuentro de Constantine (sí, hay una película y todo) con un viejo gitano que le echa las cartas y le hace una pequeña revelación: va a tener que elegir su camino.
En estas pequeñas historias se nos demuestra que Constantine es efectivamente un anti-héroe: ha sido vabagundo borracho, cantante de una banda, amiguete de punks, es un cabronazo desaprensivo...
La última de las historias es sublime y relevante para el personaje, además. John sufre un ataque y en una alucinación entra en una mansión para enfrentarse con su padre. ¿Qué carga le ata aun a él? ¿Por qué su padre va a ir al infierno? ¿Qué pasó con su madre?
Pues no, nada de spoilers. A leer...
