Pues qué bien.
Si algo nunca me ha de sorprender, eso es lo bien que me trata el azar. Siempre ofrezco blancas cuando juego al ajedrez, pero es cuestión de manías. En el caso del posting, lo hice pensando que así sería una victoria más justa, pero no sin pensar que dejar la elección de tema a mi contrincante sería una ventaja que podría acarrearme problemas.
Je,je, ni problemas ni pollas en vinagre. Después de los contrincantes que he tenido, creía que por fín me tocaría uno con el criterio suficiente como para saber elegir bien el tema a defender, pero ni eso, Jugger, ni eso.
Sólo espero que todo esto no sea un intento mas de dar la razón a Curreta sobre tu inclinación sexual, porque, permíteme, está fuera de lugar hacerlo aquí en pleno combate.
Para eso hay privados y otras formas de hacer el ridículo que tú ya conoces muy bien y a las que nos tienes acostumbrados ya en este foro a todos/as.
A ver, vamos a hablar de cartas, pero cuando digo cartas, digo hablar de cartas, no de sueños eróticos de personas sin puta vida social y onanistas compulsivos que lo único que conocen de este tema es lo que ven por un monitor de un ordenador que hace las veces de amigo, de novia, de padre/madre y hasta de almohada consultora. Vamos, que vamos a hablar de juego, Jugger, de cartas para jugar, no vamos a pelárnosla con relatos eróticos sobre playmates de blackjack ni nada que se le parezca.
Así que, pequeño friki, desde ya, ten en cuenta esas palabras e intenta hacer desaparecer tu ¿personalidad? infantil-atrofiada de cualquiera de las palabras que redactes en este ring.
Empecemos, pues, con el juego
Hay a gente que le parece que jugar al hijoputa o al tute (en realidad de origen italiano pero enraizado en España) o quizás a la escoba es ser poco
chic, o poco glamuroso. Ya, haber gente así hay, no vamos a negar una evidencia tan clara.
Los hay que donde esté un bridge, que se quite un mus, je, sí, sé que suena patético leer esto pero es una verdad así de cruda, así de grande, señores. Hay gente hortera a la cual le pones delante un producto nacional bien elaborado y se van a hacer las américas a ver si encuentran algo mejor, y cuando no lo encuentran, se convencen de que lo es.
Y digo américas porque si alguna fama tiene la baraja francesa es por américa, no por francia. No digo nada nuevo.
Este tipo de gente, en la cual hay que incluir al pequeño Jugger, son de esos que te invitan a jugar al ajedrez a su casa y te encuentras con un tablero de Stars Wars con sus caballeros jedai y todo haciendo de peones o de obispos, a saber.
Pero qué le vamos a pedir a un tipo que lleva en su DNI una pegatina de los Phoskitos por foto de carné.
En fin, a lo que iba. Deficientes hay por todas partes del mundo, pero con tanta proyección y con tanto futuro como el gatito negro (uy! qué malote) que tengo como contrincante, pocos. Es un fuera de serie.
Y es que no todo el mundo puede pretender repudiar una cultura arraigada y con historia a favor de otra, que además de ser extrangera, no tiene nada con lo cual causar envidia.
Un ejemplo:
Un idiota de tales proporciones, seguramente les propondría cambiar cualquier Carmen del Albayzin (ejemplo cualquiera) por un mounstruoso edificio inteligente de esos de cristal y las de Dios en número de plantas.
Tamaño patán que prefiere una baraja que está americanizada, pues ya sabemos que será capaz de cualquier cosa por traerse lo más
cool y fashion de cualquier país antes de pararse a intentar apreciar lo propio.
Este tipo de "personas" -por incluirlas en algo- están absortas en la propaganda pro-americana que fluye por cualquier parte del mundo intentando meternos por vena sus McRonals y sus sueños imposibles pero alcanzables gracias a ese mismo estilo.
Quitando que no sé como alguien puede preferir una baraja que está y estará marcada para siempre como la usada para señalar a
los más buscados de un gobierno Irakí. Joder, Jugger, podías haber decidido la baraja de sotas y caballos, o bien, decidir que como no puedes defender nada que tenga que ver con la cultura de este país como se tiene que hacer pues no la "usas" -en favor de los extrangerismos-, podías haberte "quedado en casa".
Por mi bien. Me alegro de poder darle a alguien una pequeña paliza antes de ir a romperle la cara al prepotente de Criadillas. Me vales de saco de boxeo.
Como este es el primer post, paso de hablar de los diferentes juegos en profundidad.
Prefiero centrarme en la parte estética de la baraja.
Sí, la estética de los Oros, los Bastos, las Copas y las Espadas.
¡Coño! Más claro no puede estar el enraizamiento cultural de esta baraja. La belleza de estar jugando con algo que representa -además de a europa- a España. A la España policultural histórica en la que vivimos y que hemos heredado. Siempre que hayas leido algo acerca de ella, claro.
Las Sotas, los Caballos, Los reyes. Es una representación perfecta de lo que ha sido España. Hablando de un juego de mesa, claro está.
Bueno, que si tú prefieres jugar con picas, tréboles y demás mariconadas, pues qué bien, peo no pretendas hacerlas pasar por encima de las nuestras. Sí, LAS NUESTRAS. Que no te enteras.
Aún me queda la intriga de si tendré que aclararte mejor lo de los iconos de la baraja española. No te veo yo muy listo.
Te veo más capaz de seguir defendiendo al símbolo de la ludopatía en forma de baraja que decidir que es imposible que tus cartas de iluso pasen por encima de nuestras cartas de juego. Sí, de juego, de las que se usan para relacionarse con la gente. De las que hacen uniones en los pueblos desde que existe la baraja española. De las que valen para jugar con los amigos (tú no tienes, pero hazte a la idea) sin tener más que piques y hacer putadas que al levantarse de la mesa, se olvidan hasta próxima.
Hasta la próxima, que al final he llegado tarde otra vez y me he pasado de la hora que prometí.
Un saludo.
Pd: A ti no, Jugger, a ti que te metan el ratón por el culo que seguro que disfrutas más que jugando a las cartas.
Pd para el árbitro: ¿Puedo seguir haciéndole la pelota? Estaba disfrutando de ello como nunca. Espero su respuesta.
Sr. Taimado.